La Personalidad del Infiel – Parte 2

Para establecer un verdadero perfil de personalidad del infiel, se requiere de evaluar varios factores, dado que son personas complejas. Por lo que veremos otros aspectos, que están involucrados según Bowlby.

  1. El factor Riesgo:

Las personas que les encanta tomar riesgos o aventuras son mas proclives a ser infieles, en comparación a las que son temerosas. Este tipo de conducta tiene una alta probabilidad de fracaso.

  1. El factor Poder:

 Las personas que tienen una posición de poder son muy propensas a ser infieles. Esto se debe a que cuando tenemos poder, nos da una sensación de confianza y buena autoestima, estas condiciones vuelven a las personas mas extrovertidas y asertivas en lo que hacen. Tienen una mirada directa, postura triunfadora y consecuentemente se muestran seductoras, dando la impresión de que son grandes amantes.

  1. El factor del deseo sexual:

Este factor varía de una persona a otra, quien tiene un alto índice de deseo, le es difícil controlarse y siempre anda en búsqueda de tener contacto sexual frecuentemente. Esto hace definitivamente que estas personas sean infieles. Mientras que hay otras personas que muestran menos interés y se sienten bien. En este factor, se encuentra un alto índice en el hombre, porque no involucra el afecto, solo el placer físico.

  1. El factor de La Psicopatía:
  2. La sociedad nos ha enseñado a ver en el amor y el romance como un vínculo sagrado y eterno entre dos individuos. Otras personas ven en el amor un juego en el que el objetivo es manipular a la otra persona y obtener el poder sobre el compañero sentimental mediante el chantaje emocional, algo muy típico de individuos con un alto grado de psicopatía. Las personas que ven el amor como un juego son mucho más propensas a tener múltiples intereses amorosos; el engaño y la mentira es sólo otra manera de obtener el control del cónyuge.
  1. El factor Económico:

El atractivo de una persona influye mucho en la probabilidad de que él o ella sean infieles. La atracción viene manifestada de diferentes maneras. Está influenciada por la apariencia física (es lo primero que los ojos ven), las habilidades sociales (carisma, don de palabra) y los recursos tangibles como el dinero. Cuanto más cerca estemos de lo que más se demanda, más probabilidades hay de ser infiel.

Aquellas personas que tienen mejor educación, mayores ingresos y carreras exitosas son más proclives a desarrollar un perfil infiel que los individuos con menos poder adquisitivo o acceso a la educación, en parte porque están más expuestas al tipo de personas que reúnen más características consideradas atractivas de forma superficial.

¿Existe alguna solución?

La podemos ver desde dos puntos de vista. Una enfocarnos en el individuo con el perfil psicológico de infiel que no puede tener una relación estable, aunque lo desee; sobre todo si esto puede deberse a factores externos como sería el tipo de pareja, quien de alguna forma influye en que este sea infiel, dadas algunas características que no le proporcione seguridad en la relación.

La otra sería verlo desde el punto de vista de los dos miembros de la relación, es decir, que ambos deberían tomar la decisión de resolver lo que les está sucediendo, buscando ayuda profesional, si es que desean continuar. Pues muchas veces los dos entran en infidelidad cuando ya quieren terminar su relación y no saben cómo.

En cualquiera de los casos, necesitan la intervención de un profesional que les haga ver lo que está sucediendo y decidir continuar o terminar. Teniendo en cuenta, que cualquier cosa que decidan, no pondrá de inmediato una solución, necesitan sanar las heridas causadas para poder seguir adelante.

Tipos de infidelidad

  1. Directa. El infiel tiene en mente ser infiel deliberadamente lo planifica.
  2. Indirecta. La infidelidad se da de manera repentina, surge sin un plan.
  3. Online o virtual. Es infiel de manera anónima, generalmente esta forma de infidelidad no llega nunca a ser directa.
  4. Física. Esta surge de un encuentro casual, no intencional, pero termina con la consumación de la infidelidad.
  5. Afectiva o Romántica. Puede o no incluir relaciones sexuales, pero sí hay un enamoramiento, esto le sucede más a las mujeres quienes se terminan enamorando.
  6. Sexual. No hay ningún tipo de apego afectivo, se lleva a cabo solo por el placer sexual, esta se da más en hombres, que buscan relaciones sin compromiso (amigos con derecho).
  7. Obligada. Se le llama así porque se da no por amor ni casualidad, si no porque la persona con baja autoestima tiende a buscar llenar fuera del matrimonio, un vacío que su pareja le hace sentir.
  8. Por adicción sexual. Este tipo es el que las personas tienen un alto apetito sexual y su pareja no les satisface su alta demanda, también es llamado Adicción al Sexo.
  9. Por despecho. Es una forma de venganza hacia la pareja que le ha sido infiel y decide hacer lo mismo para que el otro experimente lo que se siente.
  10. Tarzán. La cometen las personas que están mal en su relación y no se atreven a terminarla o sospechan que el otro tomará la iniciativa y se anticipan para no quedarse solos.
 

Jacqueline Alvarenga

 

Psicóloga Clínica y Psicoterapeuta